Buenos días a todo@s
Hoy os quiero contar mi experiencia en la conocida peluquería Lorena Morlote.
He de contaros que yo nunca suelo ir a la peluquería. Ni para las bodas, bautizos...etc. No me gusta 'casi nunca' como me dejan el pelo. Prefiero hacérmelo yo, la verdad.
Pues bien, hay cosas que son inevitables. El corte de pelo es una de ellas. Por muy 'apañada' que sea una, cortarse el pelo así misma nunca trae buenos resultados. Ni siquiera con el antiquísimo truco de cortar la coleta alta para obtener un escalado al instante...
Empezaba el verano y tocaba cortarse esas puntas tan dañadas y abiertas después de un invierno de secadores y planchas. La cuestión era ¿qué peluquería escojo?
Claro. Siempre están -para un apaño rápido- los millones de Marco Aldani que hay en cada esquina de Madrid. Pero, como se trata de algo que no suelo hacer a menudo (ir a la peluquería) decidí probar una peluquería conocida. ¡Para darme el gusto!
Tenía en mente dos, Lorena Morlote y Moncho Moreno. No sabía cómo decidirme, así que bajé a hablar con mis compis de Telva. Concretamente con Gloria Vázquez @TicTacTrendy. Gloria es una auténtica experta en esto de la belleza, y una mujer con un encanto increíble, además de una de las creadoras de uno de mis blogs favoritos, Diario de Belleza.
Me recomendó Lorena Morlote ya que, según los expertos, tiene un aire más juvenil que Moncho. Pedí cita y, al día siguiente, allí estaba.
He de decir que la atención es inmejorable. Personalizada. Se toman el tiempo necesario para entender y buscar la mejor solución a tu reclamo. Algo que se agradece bastante.
Una vez claro el tratamiento, comienza el momento de placer: el lavado. Mientras estás con los pies en alto, en un sillón con vibración incluida, uno de los peluqueros te masajea el cuero cabelludo de esa forma que te hace desear que no acabe nunca.
Después del lavado pasamos al corte. Maravilloso. Un corte perfecto, como hacía mucho tiempo que no conseguía. Además, y según me dijo una amiga que ya había ido, muy duradero.
Por supuesto, el peinado fue igual de bueno. Me gusta el pelo con ondas suaves y, cuando voy al resto de peluquerías, salgo que parezco una vieja de 80 años. Con unos tirabuzones cerrados que me suelen, además, encoger el pelo. Horrible.
Pero esta vez no. Salí contenta. Rarooo en mi :)
Además, tienen un detalle estupendo con sus clientas. Una chica se presenta en tu puesto -una vez que te han lavado- para retocarte el maquillaje. Brillante.
Por ello, os recomiendo que vayáis a esta peluquería y que lo hagáis antes de septiembre porque como ya sabéis sube el IVA para este servicio al 21%, Así que ... aprovechar.
Un beso
Hoy os quiero contar mi experiencia en la conocida peluquería Lorena Morlote.
He de contaros que yo nunca suelo ir a la peluquería. Ni para las bodas, bautizos...etc. No me gusta 'casi nunca' como me dejan el pelo. Prefiero hacérmelo yo, la verdad.
Pues bien, hay cosas que son inevitables. El corte de pelo es una de ellas. Por muy 'apañada' que sea una, cortarse el pelo así misma nunca trae buenos resultados. Ni siquiera con el antiquísimo truco de cortar la coleta alta para obtener un escalado al instante...
Empezaba el verano y tocaba cortarse esas puntas tan dañadas y abiertas después de un invierno de secadores y planchas. La cuestión era ¿qué peluquería escojo?
Claro. Siempre están -para un apaño rápido- los millones de Marco Aldani que hay en cada esquina de Madrid. Pero, como se trata de algo que no suelo hacer a menudo (ir a la peluquería) decidí probar una peluquería conocida. ¡Para darme el gusto!
Tenía en mente dos, Lorena Morlote y Moncho Moreno. No sabía cómo decidirme, así que bajé a hablar con mis compis de Telva. Concretamente con Gloria Vázquez @TicTacTrendy. Gloria es una auténtica experta en esto de la belleza, y una mujer con un encanto increíble, además de una de las creadoras de uno de mis blogs favoritos, Diario de Belleza.
Me recomendó Lorena Morlote ya que, según los expertos, tiene un aire más juvenil que Moncho. Pedí cita y, al día siguiente, allí estaba.
He de decir que la atención es inmejorable. Personalizada. Se toman el tiempo necesario para entender y buscar la mejor solución a tu reclamo. Algo que se agradece bastante.
Una vez claro el tratamiento, comienza el momento de placer: el lavado. Mientras estás con los pies en alto, en un sillón con vibración incluida, uno de los peluqueros te masajea el cuero cabelludo de esa forma que te hace desear que no acabe nunca.
Después del lavado pasamos al corte. Maravilloso. Un corte perfecto, como hacía mucho tiempo que no conseguía. Además, y según me dijo una amiga que ya había ido, muy duradero.
Por supuesto, el peinado fue igual de bueno. Me gusta el pelo con ondas suaves y, cuando voy al resto de peluquerías, salgo que parezco una vieja de 80 años. Con unos tirabuzones cerrados que me suelen, además, encoger el pelo. Horrible.
Pero esta vez no. Salí contenta. Rarooo en mi :)
Además, tienen un detalle estupendo con sus clientas. Una chica se presenta en tu puesto -una vez que te han lavado- para retocarte el maquillaje. Brillante.
Por ello, os recomiendo que vayáis a esta peluquería y que lo hagáis antes de septiembre porque como ya sabéis sube el IVA para este servicio al 21%, Así que ... aprovechar.
Un beso